jueves, 10 de julio de 2014

Campeonato de España de ajedrez rápido sub10

El pasado fin de semana Nacho, mi hijo, participó en el campeonato de España de partidas rápidas en categoría sub-10. Íbamos al torneo con muchas ilusiones pero sabiendo de lo difícil de la aventura. Llegamos al hotel Best Western Salobreña con tiempo suficiente y nos acercamos a la sala de juego solo para enterarnos que no podíamos entrar. Lógico en estos tiempos tan complicados para el ajedrez con la tecnología en la punta de los dedos.

Nacho aprovechó para estrenar la piscina y yo para relajarme un poquito a la sombra. A las cinco en punto se ponían los relojes en marcha y daba inicio el torneo. Por suerte la organización nos permitió a los padres permanecer en la sala en una zona acordonada.

Primera partida y primera derrota. Una gambito de dama rehusado con negras en el que perdió un peón en la apertura y en la obsesión de recuperarlo se deja el mate del tubo. En la segunda consigue unas tablas tras una lucha sin cuartel y rechazar el ofrecimiento del rival hasta en tres ocasiones pero pierde la tercera en una combinación de mate en tres. La última de la tarde la gana muy encorajinado sin darle opción al rival.

El domingo en la segunda jornada hizo dos puntos de cinco. Jugó bastante bien pero contra rivales difíciles. Quizá el peor momento fue cuando hizo una ilegal en séptima ronda y con la nueva reglamentación perdió la partida. Se vino abajo y se le escaparon unas lágrimas. Se consiguió reponer y ganar la octava pero perdía una novena partida muy difícil en la variante Kann de la siciliana con blancas que, reconozco, no llevaba suficientemente preparada.

Las sensaciones son ambivalentes. Nacho quedó decepcionado de no haber hecho algo más. Yo se que podía haber hecho algún punto más. Sin embargo excepto el mate del tubo en la primera partida y la ilegal en la séptima jugó bien e incluso sacrificó un caballo para conseguir un mate en tres en la quinta. Creo que su puntuación y clasificación final no refleja el juego que desarrolló en el torneo y estoy muy orgulloso de su comportamiento y alegría a lo largo del mismo. El sin embargo quedó algo frustrado, esperaba más y quizá yo debí ponerle los pies en el suelo antes del torneo. Es un campeonato muy dificil y jugo muy bien. No se le puede pedir más. Si persevera en unos años será un rival formidable. Me ha demostrado que es un buen jugador pero que aún es mejor persona y eso, diga Fischer lo que diga, es muy importante.

Adjunto enlace al torneo, unas fotos y video.

Chess-results